〉Elaboración de la masa
– Lo primero que haremos será poner las hojas de gelatina a hidratar en agua muy fría.
– Partimos la piña en trocitos pequeños y reservamos.
– En un cazo, calentamos la leche junto con el azúcar y el zumo de la piña hasta que hierva. En ese punto, lo apagamos y dejamos que enfríe un poco.
– Cuando haya atemperado, añadimos las hojas de gelatina bien escurridas y removemos bien para que se disuelvan por completo. Reservar.
– En la amasadora, batimos enérgicamente el queso creoma (que deberá estar muy frío) y cuando esté bien creemos, añadimos la mezcal de la gelatina, leche, azúcar y zumo de la piña.
– Batimos la mezcla hasta que tengamos una masa homogénea sin grumos.
– Incorporamos los trozos de piña reservados y con una espátula de goma, lo repartimos bien por toda la masa.
- Finalmente, vertemos la masa sobre el molde elegido y dejamos reposar al menos 4 horas (mejor siempre de un día para otro)
Hola! Este tipo de tartas nos encantan así que apuntada queda! Esta semana hemos coincidido con receta sin horno jeje por cierto, la tarta de tu niño chulísima y lo importante es que fue un éxito, seguro que en la foto parecía más inclinada que en persona! Besis
Quiero hacerla. Son sabores que me encantan y seguro que triunfa!
Bss