– Comenzamos separando las yemas de las claras de los huevos y montamos éstas en la amasadora junto con unos 50 gr de azúcar a velocidad alta hasta que obtengamos un merengue firme y duro. Reservar.
– A continuación, batimos las yemas de los huevos con el resto del azúcar mucho rato, hasta que éstas blanqueen y dupliquen el volumen.
– Incorporar la esencia de vainilla al gusto y batir un poco más.
– En ese momento empezamos a añadir las claras montadas haciéndolo con movimientos envolventes de abajo hacia arriba, para evitar que se bajen.
– Finalmente, añadimos las harinas y terminamos de integrar todo.