Podríamos pensar que muchas de las hamburguesas/albóndigas que venden ya hechas son sólo carne.
Pero no es así. De hecho la mayoría llevan entre sus ingredientes conservantes y unificadores, que precisamente, llevan gluten.
Por ello, siempre, siempre, deberán estar certificadas.
Por supuesto, hablas con tu carnicero de confianza y te las prepara en un entorno seguro y simplemente con la carne picada, no hay problema alguno.