Situado en el East Village, local donde sólo hacen macarrones y por supuesto, los celiacos tenemos nuestras opciones de poderlos comer sin gluten.
De nuevo un italiano, esta vez ubicado en Greenwich Village, con una pequeña pero cuidad carta sin gluten.
Las críticas gastronómicas recomiendan sus pizzas.
Cuentan con una cocina separada para hacer nuestra comida, así que el riesgo de contaminación cruzada es prácticamente nulo.