– Cubrimos con papel de horno la base del molde que vayamos a utilizar. Vertemos caramelo líquido y lo esparcimos por toda la base. Reservar.
– Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría.
– Montar la nata junto a los 50 grs de azúcar glas. Reservar en el frigorífico.
– En una batidora, echamos las rodajas de piña, el zumo de limón y el azúcar y batimos bien hasta que tengamos una especie de puré.
– En un vaso, coged unas 3 cucharadas del jugo de la piña y calentadlas un poquito en el microondas. Escurrid las hojas de gelatina, echadlas en el jugo y batid hasta que se hayan disuelto por completo.
– Agregamos la mezcla a la crema de piña y batimos un poco para homogeneizar todos los ingredientes.
– Finalmente incorporamos la nata a la crema de manera envolvente, para evitar que se nos baje.
– Echamos nuestra masa al molde y dejamos reposar como mínimo, 8 horas en el frigorífico.
– Al dia siguiente, desmoldamos y dejamos en el frigorífico hasta 10 minutos antes de consumirlo.